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Recientemente haciendo unas búsquedas para documentar un artículo para este blog sobre la supuesta inquietante relación entre la programación y el síndrome de Asperger, me encontré por casualidad con los Atari Archives. El dominio de la web puede inducir a error ya que los archivos en ella recogidos no van únicamente de cosas relacionadas con Atari.
Allí hay muchas reliquias, como por ejemplo este libro con un listado de juegos de Basic, o este libro sobre código máquina para principiantes. También hay una recopilación en tres volúmenes de la que muchos consideran la primera revista para informáticos y aficionados a la programación de la historia, Creative Computing. Fue una de las pioneras en cubrir la revolución de los microcomputadores, englobando los campos de la informática para aficionados e informática doméstica en un lenguaje mucho más accesible que el empleado en la revista contemporánea Byte.
El primer volumen de la recopilación de lo mejor de Creative Computing tuvo que sacar una segunda edición con una portada diferente a la de la primera ya que en ella figuraba el mítico Capitán Spock de Star Trek y la Paramount, dueña de los derechos, se estaba empezando a poner seria con el tema del copyright y los dueños de la revista querían evitar problemas:
Para la portada de la segunda edición utilizaron un descarte que habían diseñado para un ejemplar de tirada regular de la revista:
Si nos detenemos a curiosear por los archivos de Atari Archives y analizamos un poco el estilo y el tono de la revista rápidamente caemos en la cuenta de lo outsider y marginados que estaban los aficionados y las personas que se dedicaban a la informática en los años 70 y 80. Estas revistas son muy stranger things, pero de verdad, sin el barniz del ñoño marketing nostálgico que impera en la actualidad:
En la era predigital de los 80 y 90 abundaba la figura del geek solitario que buscaba refugio en sus "primos-hermanos" los empollones (nerds) para jugar al rol y fantasear sobre hipotéticos cambios de guión en Dragones y Mazmorras. En los 80 había una saga entera de Hollywood, The Revenge of the Nerds (que en España se tradujo aberrantemente como "La venganza de los novatos"), dedicado a estas personas y el lema de las pelis era algo así como "¡Es hora de ajustar cuentas!" Yo nací y me crié en EEUU, vivía allí por aquel entonces y recuerdo que nadie quería ser etiquetado como geek o nerd, todos querían ser el quarterback del equipo o la animadora. Y no era un estereotipo. Era así.
El principio del cambio
Esa época ha pasado a mejor vida, y ahora vivimos inmersos en lo "geek chic". Hoy en día alrededor de la cultura geek se ha creado una moda, un orgullo nerd, con la catapulta de Internet y el avance exponencial de la tecnología. El marketing nostálgico ensalza los valores geek y está haciendo que lo que no molaba en los 80, sea guay ahora. Las productoras de series están reescribiendo la historia con series como Halt and Catch Fire, Big Bang Theory, IT Crowd o incluso Stranger Things.
Existen innumerables series de televisión sobre geeks que el público generalista consume a diario, ensalzando y poniendo de moda el tema. Incluso a nivel estético se han resucitado los diseños que en otros tiempos eran motivo de bullying y marginación social. Y no es broma. Crecer en los 80 siendo un empollón en USA no era un experiencia muy llevadera para un pre-adolescente y sé en primera persona de lo que estoy hablando.
Pero, ¿cómo se produjo este cambio? Bueno pues podemos empezar diciendo que a finales de los 90 y sobretodo con el cambio de siglo, ya en plena era digital, emergieron los empollones "alfa" como Bill Gates y Steve Jobs que empezaron a ganar mucho prestigio, dinero y un poder sin precedentes. Pasaron de ser unos frikis a ser ricos e influyentes. Y luego vino Napster, que era una forma cool y revolucionaria, incluso rebelde-transgresora diría, de compartir música vía P2P y, aunque muchos sectores de la industria musical les denunciaron por los temas de derecho de autor y hubo una gran controversia y confusión en torno al software, ayudó a crear una imagen más amigable, más molona y más enrollada de la tecnología entre los más jóvenes. Los empollones empezaron a hacer cosas que se iban progresivamente incorporando a la sociedad civil, al uso generalista, con Internet como plataforma de distribución. Napster y Windows Live Messenger era el pan de cada día para muchos migrates digitales en edad adolescente justo en el cambio de siglo.
Y el resto ya es historia: del sobremesa al portátil al smartphone con apps de todo tipo para todos los propósitos; de Napster a Spotify a Apple Music; de Messenger a Facebook a Instagram; de SMS a Mensajería Instantánea; de generaciones predigitales a migrantes digitales a nativos digitales; los niños programadores, los emprendedores tecnológicos, las aceleradoras de empresa, etc.
Desde entonces hasta nuestros días este fenómeno no ha hecho más que crecer exponencialmente. Las creaciones ideadas por geeks han cambiado la forma en que vivimos. Ni el trabajo ni la educación ni la forma en la que nos relacionamos volverán a ser la misma.
¡Ya se han ajustado las cuentas! 😈